martes, marzo 25, 2008

Notas del viaje a Nueva York

Para mi sorpresa, ayer me armé de paciencia y luchando contra mis limitaciones en el terreno del lenguaje escrito (tardo minutos en parir una sola frase, sea ésta buena o no) conseguí redactar unos párrafos sobre mis andanzas newyorkinas. En vez de hacerlo en formato crónica he preferido agruparlo en torno a los tres puntos que destaqué ayer y que más me llamaron la atención: La ciudad en sí, la cultura y las compras. Aquí quedan para la posteridad y por si alguno se anima a visitar la ciudad en un futuro próximo.
La ciudad
Salvo una escapada al barrio de Queens yBrooklyn, estuvimos sólo en Manhattan que como ya señalé me maravilló. No sólo su visión desde el horizonte (skyline que dicen los ingleses) es impresionante, sino que también caminar por sus calles te deja con la boca abierta. Los rascacielos del Midtown y del Down Manhattan son espectaculares pero los edificios entre ellos tampoco se quedan atrás. Entre los rascacielos destacaría:
  • El Empire State Building que sigue siendo el más alto de N.Y. después del derrumbe de las Torres Gemelas. De principios de los años 30, se construyó en escasos 14 meses y aunque en estos momentos su interior está siendo reformado, su fachada y las vistas que ofrece sobre la ciudad son impresionantes.
  • El Rockefeller Center, en realidad un conjunto de edificios de corte Art Decó, tiene, en su construcción más alta, otro de los mejores miradores de la ciudad, el Top of the Rock. Desde aquí hay unas vistas inmejorables a Central Park y al Empire State Building. Sin duda recomendable una visita a su interior y a la plazoleta exterior que hace de terraza en verano y pista de hielo en invierno.
  • El edificio Chrysler, que en mi opinión muestra la silueta más bella.
Hay muchos otros impresionantes en la zona financiera de Manhattan, pero de los cuales ni si quiera se su nombre.
En cuanto a otras construcciones no tan grandiosas en altura pero sí en forma, visitamos:

Recorrer las avenidas 4th, 5th, 6th, 7th, Times Square y Broadway es un regalo para los sentidos, sin olvidarse de un tranquilo paseo por Central Park o por Brooklyn Heights Promenade al atardecer (primera cosa que haría nada más llegar a N.Y.)

La cultura Lamentablemente, sólo nos dio tiempo a visitar cinco museos y asistir a un par de conciertos.
  • El Metropolitan es sin duda la estrella de la cuidad. Como comentaba anteriormente, es un museo universo que contiene a todos los demás museos del mundo con las mejores piezas de cada cultura: arte asiático, medieval, africano, egipcio, pintura renacentista, flamenca, impresionista,... incluso hasta un comento completo o un patio andaluz de mármol de la época de la reconquista. Un sin fin de salas para cuya completa visita se necesitarían 4 o 5 días.
  • El MOMA o Museun Of Modern Art, que atesora más picasos que ningún otro museo, también tienen merecida una visita, aunque yo no se apreciarlo. Sin embargo, sí me llamó la atención la exposición temporal que tenían sobre el "arte" como subproducto de la ciencia.
  • El American Museum of Natural History, que hace un recorrido sobre la fauna y la etnología de todo el planeta, es ideal para los niños y no tan niños. Tiene dos secciones especialmente espectaculares: la de restos de fósiles y dinosaurios y la dedicada al espacio, donde pudimos ver el planetario la proyección "Cosmic collitions".
  • El Guggenheim, que sin ser ni la mitad de impresionante que el de Bilbao, tenía una exposición muy curiosa del artista chino Cai Guo-Qiang.
  • El último museo al que fuimos fue el Museo de arte de Queens, que alberga una maqueta enorme de la ciudad de Nueva York, con la que te puedes hacer una idea de todo lo que no te va a dar tiempo a ver.
En cuanto a la música, Nueva York es el padre de los musicales y sus más de 50 espectáculos en cartelera lo confirman. Sin embargo nos decantamos por sus raíces de Jazz (hay infinidad de sitios con conciertos todos los días), y nos fuimos a ver uno de los que organiza el Lincoln Center en el Dizzy's club Coca-Cola (cena y jazz con vistas a Central Park no se tienen todos los días). El arpista, Edmad Castaneda, fue todo un descubrimiento. También asistimos de casualidad a un concierto de música clásica en el afamado Carnegie Hall, a cargo de un dúo de pianistas queestoy seguro darán mucho de que hablar (The Yukawa-Chan piano duo). Lo de casualidad viene a que nos regalaron las entradas cuando nos proponíamos a visitar el edificio por dentro. :-D Gospel y Blues en Harlem nos quedaron para otra ocasión, con mucha pena de nuestro corazón.
Las compras
Nueva York es una ciudad relativamente barata si la comparas con Madrid, especialmente en cuestión de compras de ropa y electrónica. (Cada vez que vuelvo de un viaje siempre me quedo con la sensación de que en este país nos tienen engañados con la idea generalizada de que disponemos de una buena relación "salarios-coste de la vida" pero la verdad es bastante distinta).
  • De entre todas las tiendas de lujo, el Macy's y sus escaleras mecánicas de madera y demás centros de ropa me quedo con el Century 21. Situado en frente de la Zona Cero, es una especie de Corte Inglés a lo Factory, donde puedes encontrar cantidad de cosas por un 40 o 50% menos de lo que pagarías en Españapor ellas. Uno de los motivos es que las prendas de vestir en Estados Unidos carecen de impuesto.
  • En cuanto a la electrónica mencionar tres tiendas como las indiscutiblemente mejores:B&H para todo lo relacionado con imagen (foto, video, optica,...), J&R y el Apple Store de la quinta avenida para ponerse los dientes largos con el I-Phone yMacBook Air. Nunca, jamás, por ningún motivo se ha de comprar nada en las tiendas de decomisos que abarrotan las calles principales. Sencillamente están allí para hacer el día a costa de los turistas despistados.
  • En el apartado de libros, sin comentarios. Otra vez más compré los libros un 50% más baratos que en España, eso sí, en la tienda de segunda mano Strand Books (aunque están como nuevos).
  • Poco miré en discos y comics, pero como os podréis imaginar la cantidad y el precio superan con creces la oferta de Madrid. En mi voluminosa maleta aun pude meter algo de Charlie Parker (Best of The complete Savoy), Ornette Coleman, Charles Mingus (The black saint and the Sinner Lady) yla colección completa de "The Blues, a musical journey" de Martin Scorsese.

Alguna curiosidad

  • La estatua de la Libertad es canija.
  • Quien sufra de soladed que se acerque a Times Square.
  • Casi te puedes olvidar de encontrar un mercado de comida a no ser en el barrio chino o los tipo Badulaque de Apu.
  • Tienes la rara sensación de que conoces a todos los afroamericanos que te cruzas por la calle y es de verlos en las series y en las películas. :-D
Bien, seguro que me olvido de muchas cosas pero espero haberos convencido de que la visita a la Gran Manzana merece la pena. ¡Si hasta la gente es encantadora! ¡Lástima que no sepan lo que es un montadito y un cocido!
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1 comentario:

  1. Si señor te lo has currao tío chuso. Genial como guía, no dudes que si me ven la cara por allí, será con la Guía-Chuso, en el bolsillo.

    Poco me cuentas del partidillo de Basket, que tal fue? Supongo que como todo “A LO GRANDE”.

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