No sólo están los cuerpos resentidos por los excesos navideños. También las calles sufren con estas celebraciones gracias al espíritu comunitario y navideño de mis conciudadanos y a la poca previsión de ayuntamientos/dirigentes incompetentes. Esta imagen, recogida al azar en Alcorcón, seguro que se repite en todas las ciudades españolas.
¿Salvar a la Tierra del cambio climático? ¡Lo dudo mucho! Ni si quiera somos capaces de concienciarnos de lo que tenemos a la vuelta de la esquina.
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A estas alturas de la movida, seguramente a muchos niños Papá Nöel les trae directamente cajas vacías. Son mucho más entretenidas que los jueguetes y no hay que tirarlas luego.
ResponderEliminarY encima con la huelga esa que arrastráis en Madriz... mucho peor... La verdad es que ayer ni hoy he pasado cerca de una montaña así, pero es que aquí tiene mucho más tirón (con diferencia) el día 6...
ResponderEliminarEyyy unas luces por encima y... LA MONTAÑA DE NAVIDAD.
ResponderEliminarSeguro que lo podemos patentar.