miércoles, abril 30, 2008

¡Cómo cambian los tiempos!

En el siglo XII, los frany (franceses) están muy atrasados en relación con los árabes en todos los campos científicos y técnicos. Pero es en medicina donde la diferencia es mayor entre el Oriente desarrollado y el Occidente primitivo. Usama observa la disparidad:
Un día -cuenta-, el gobernador franco de Muneitra, en el monte Líbano, escribió a su tío Sultán, emir de Shayzar, para rogarle que el enviara un médico cristiano de nuestra tierra llamado Thabet. Éste sólo se ausentó unos días y luego regresó entre nosotros. Todos sentíamos gran curiosidad por saber cómo había podido conseguir tan pronto la curación de los enfermos y lo acosamos a preguntas. Thabet contestó: "Han traído a mi presencia a un caballero que tenía un absceso en la pierna y a una mujer que padecía de consunción. Le puse un emplasto al caballero; el tumor se abrió y mejoró. A la mujer le prescribí una dieta para refrescarle el temperamento. Pero llegó entonces un médico franco y dijo: "¡Este hombre no sabe tratarlos!" Y, dirigiéndose al caballero, le preguntó: "¿Qué prefieres, vivir con una sola pierna o morir con las dos?" Como el paciente contestó que prefería vivir con una sola pierna, el médico ordenó: "Traedme un caballero fuerte con un hacha bien afilada." Pronto vi llegar al caballero con el hacha. El médico franco colocó la pierna en un tajo de madera, diciéndole al que acababa de llegar:"Dale un buen hachazo para cortársela de un tajo!" Ante mi vista, el hombre le asestó a la pierna un primer hachazo y, luego, como la pierna seguía unida, le dio un segundo tajo. La médula de la pierna salió fuera y el herido murió en el acto. En cuanto a la mujer, el médico franco la examinó y dijo:"Tiene un demonio en la cabeza que está enamorado de ella. ¡Cortadle el pelo!" Se lo cortaron. La mujer volvió a empezar entonces a tomar las comidas de los francos con ajo y mostaza, lo que le agravó la consunción. "Eso quiere decir que se le ha metido el demonio en la cabeza", afirmó el médico. Y, tomando una navaja barbera, le hizo una incisión en forma de cruz, dejó al descubierto el hueso de la cabeza y lo frotó con sal. La mujer murió en el acto. Entonces, yo pregunté: "¿Ya no me necesitáis?" Me dijeron que no y regresé tras haber aprendido muchas cosas que ignoraba sobre la medicina de los frany.
Fragmento de Las cruzadas vistas por los árabes de Amin Maalouf Technorati Tags: , , , ,

4 comentarios:

  1. Me cago en la puta, vaya con el franco, a este no se le acumulaba el trabajo. Jejeje.

    La de perrerías, que habrán echo estos “mecánicos del swin” en nombre de la medicina. Y lo peor de todo, a ver quien les tosía. El “Chumari” ese si que vale.

    Que tal un coffee… el viernes, en mi casa??

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  2. La foto tiene truco, ya que es un ocaso. Tan solo era ponerle imagen al titular del Saramago.

    Ah, y porque sale Mordor, ejejeje.

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  3. El Islam era sin duda la cultura más floreciente durante buena parte de la Baja y de la Alta Edad Media, parece que ahora se nos ha olvidado pero les debemos muuuuuuuuuuuuucho.

    Bien visto Chuso y perdona mis recientes ausencias pero últimamente estoy hasta arriba!

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  4. Buena historia, vive dios. Me apunto el título, mil gracias :-)

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